Robert Neville, el último hombre que queda sobre la faz de la Tierra, vive encerrado en su propia casa y es asediado por vampiros todas las noches. El día es suyo por entero, ya que los demoníacos seres que han heredado el planeta solo pueden salir cuando el sol se esconde.
Con "Soy leyenda" Matheson reinventa el mito del vampirismo, achacándolo a motivos bacteriológicos y dando una explicación científica a toda la tradición y sintomatología que se conoce al respecto (salir únicamente al anochecer, intolerancia al ajo…).